Juguemos un poco de póker? (Libre)

Ah deliciosa tarde tan cálida que le hacía sentir reconfortado, ah pro que tenía que ser débil al frio? parecía una serpiente buscando calor para sentirse mejor, aunque no mal pensar por favor, el peli verde solo aceptaba el calor que el mundo le brindaba pero aquel contacto humano ya sea en un simple abrazo o beso le desagradaba, solo veía al resto como muñecos listos para jugar con ellos

-Hey Gumo tu turno ya va a empezar- se hoyo que llamaban al peli verde el cual volteo para ver quien le llamaba viendo al pervertido de su jefe que no perdía oportunidad de lanzarle miradas que le hacían querer golpearle, pero bueno trabajaba ahora en un burdel aquel ambiente no le desagradaba pero estaba harto de su jefe, si no estaba acosando a los chicos lindos y tiernos de sus compañeros le acosaba a él, menos mal y el peli verde le tenía paciencia porque gracias a ese sujeto tenía hogar y comida, de no ser por eso ya le hubiera torturado o asustado

-Hai hai jefazo… hum!!!!~~~~-estiro sus brazos y camino hasta la barra en donde atendía los pedidos de los clientes que iban a beber… aunque la mayoría buscaba a sus compañeros para darse mimos entre ellos, le gustaba en parte aquel ambiente de lujuria y prohibición, en que ocultos por la noche sujetos de todas partes venían en la cálida compañía de un amante nocturno, aunque el no trabajara en aquello se entretenía mirando y asistiendo en las jugadas de póker, jugando bromas a los que salían de aquel lugar cuando acababa su turno o bien solo sirviendo unas cuantas copas

Y fue asistiendo en un juego de póker en que se inició una discusión y uno de los hombre empujo a uno de sus compañeros sin quieres haciéndole caer y lastimarse el tobillo, de inmediato el jefe apareció y como era un hombre grande y robusto saco a ambos del lugar echándolos a la calle advirtiéndoles que peleas no quería en el lugar, pero eso dejo a uno de los bailarines lesionado pues al parecer se torció el tobillo y el jefe no hayo nada mejor que enviarle a el a bailar al rincón de los privados, un pequeño sector en donde habían pequeñas habitaciones para que un solo cliente o a los más unos 4 entrase y disfrutase de un espectáculo privado siendo rodeado el pequeño escenario y el sillón por cortinas rojizas que impedían la mirada del resto del publico

El peli verde no tuvo más opción y fue hasta unas de las mini habitaciones más alejada del público y la más arrinconada, le desagradaba tener que hacer aquello, y todo por un juego de póker que acabo mal, hum ahora si se lo pensaría mejor si asistía un juego de póker con individuos medios pasados de copas y de apariencia violenta, pero bueno solo sería baila no es verdad?... aunque quizás… y encontrase una presa con la cual divertirse un rato pensamiento que le hiso sonreír como niño que desea jugar una broma en pleno Halloween

*Habia visto aquel problema ocasionado por el alcohol, era algo típico en ese mundo que los humanos y toda aquella raza que bebiese demasiado y que hubiese nacido en ese plano hiciese ese tipo de tonterías, mientras bebía tranquilamente vio a un chico de pelo verde y ojos muy bellos y llamativos, el joven parecia, ser el reemplazo del que se habia lastimado y la verdad era que nunca lo habia visto y cuando vio que este se metia en el ultimo cuarto, asi que se puso en pie dejando su bebida y se encamino hacia aquel cuarto, al llegar jalo la cortina rojiza, para luego entrar*

Muy buenas noches *comento con una sonrisa mientras se adentraba pero antes volvia a jalar la cortina para que quedase cerrado el lugar, luego avanzo hasta un sillón y tomo asiento, mientras sus ojos veian y se deleitaban ante aquel joven demonio, al parecer seria una noche muy interesante para él*

Suspiro resignándose arreglando un poco sus ropas y cabello tratando de lucir lo más presentable dentro de lo posible pero con un pequeño cambio, dejo salir sus cuernos y en su ojo izquierdo se formó aquel tatuaje que poseía cuando revelaba su forma por completo, mas su actos pararon al escuchar una voz retumbando suavemente por el lugar, le miro de reojo apenas volteando sonriendo un poco ladino malicioso quizás, espero a que las cortinas fuesen cerradas volteando entonces haciendo un pequeña reverencia preguntándose si sabría que había ido a parar con un demonio...aunque aquel sujeto tenía un aroma familiar para él, también sería un demonio?

-Bienvenido joven...espero que disfrute del show- menciono con voz suave y juguetona poniendo una de sus manos en el tubo que atravesaba aquel mini escenario acariciándolo levemente con la yema de sus dedos protegidos por sus guantes negros

-Mi nombre es Gumo, y seré su bailarín por esta noche, estaré a sus servicios- comento mirándole desde el mini escenario mientras la música comenzó a sonar y como abrazándolo con cariño rodeo a aquel caño con ambas manos apegándose a este y luego también con su pierna derecha dando un fino y sensual movimiento descendiendo de forma lenta subiendo lentamente para luego dar un giro sosteniéndose al tubo volviendo al sensual movimiento mientras pensaba en alguna sucia y divertida broma que jugarle a su cliente, oh maligna tentación que tenía que claro si su jefe se enteraba de las maldades que le había hecho a algunos clientes le reprendería pero bueno, además un par de sustos no podían ser tan graves además aún no se metía en problemas, la luz comenzó a bajar lentamente viéndose un ambiente aún más tentado y afrodisiaco con aquellas cortinas rojizas y la luz tan tenue, sin duda aportando un poco más de sensualidad al espectáculo y al lugar en si, quizás hasta para algunos mágico y misterioso

Buenas noches Gumo, es un placer *Comento con una sonrisa, para luego cruzarse de piernas mientras seguía con aquella sonrisa y observaba atento a Gumo sin perderle de vista su cuerpo*

Mi nombre es Alastor... *agrego, mientras sus ojos seguían cada movimiento y acción de Gumo, los cuales le parecian deleitantes, a pesar de la poca luz que comenzaba a ver, el podía verlo como si aun hubiese demasiada luz, al mismo tiempo que por su mente pasaban varios pensamientos, la mayoría eróticos, despues de todo siempre que iba a esos lugares era para deleitarse con el personal nuevo*

Los movimientos continuaron de forma sensual y suave siguiendo el ritmo de la música que ambientaba el lugar, escucho el nombre ajeno sonriendole ladino sintiendo la mirada ajena sobre el, bueno no estaba acostumbrado pero trabajo era trabajo y su jefe le daría la lata reprendiéndole si no lo hacia

Luego de unos minutos la música se debuto y los ojos verdes se posaron en el otro mientras acababa por fin el baila, se arrodillo descendiendo suavemente aun sobre el escenario quedando arrodillado en este mirando al joven

-Bien joven Alastor...ah disfrutado del espectáculo o desea uno mas?- menciono con su típico tono de bos misterioso y jugueton

Creo que deseare uno más, aunque algo más extenso quisiera que fuese *Comento con una sonrisa mientras cruzaba sus piernas y le observaba de manera interesada, aunque esto solo era para ver como reaccionaria y que haría Gumo ante sus estímulos y respuestas hacia él*

Disculpa mi curiosidad pero me gustaría saber... Lo haces por conseguir dinero o solo por diversión? *PRegunto antes de que Gumo respondiece a lo anterior, despues de todo siempre que investigaba debia ser de la forma más detallada para luego satisfacer sus propios caprichos sexuales*

-Ah... como guste joven entonces bailare mas para usted- comento mientras la música lentamente volvía a sonar y el peli verde se movía meneándose como si fuese una serpiente recorriendo de forma insinuante aquel caño como si nada aunque la verdad es que le ponia algo nervioso la forma en que le miraba. Escuchando a Alastor sonrió ladino sin dejar de bailar

-La verdad es que este no es mi trabajo, soy el encargado del bar y de supervisar las partidas de poker pero bueno digamos que soy el remplazo de la noche, y lo hago... por mera diversión... me divierto con los idiotas del bar jugarle una broma a alguien de ves en cuando me cae muy bien- comento sonriendo malignamente mientras un extraño brillo se vio por un segundo en sus ojos al pensar en aquello, el demonio realmente disfrutaba de aquel pasatiempo que tenia y la verdad poco le importo decirlo de esa forma

-Que puedo decir... mi parte demonio goza con eso... dígame por que el interés? algún motivo en especial?-comento volviendo a sonreír maliciosamente mientras no detenía en ningún momento el baile tan sensual y provocativo en medio de la oscuridad